BMW planea una versión de su camioneta X5 que funciona con celdas de combustible de hidrógeno, como parte del plan del fabricante de automóviles de producir tantas variantes como sea posible hasta que una tecnología sea dominante.
El i-Hydrogen NEXT tendrá una producción limitada a partir de 2022, dijo la empresa alemana en un comunicado. Toyota Motor Corp. suministrará las celdas de combustible para el vehículo. La tecnología «podría tener el potencial de convertirse en otro pilar en el portafolio de BMW», dijo el CEO Oliver Zipse.
Las celdas de hidrógeno se consideran una alternativa viable porque proporciona un reabastecimiento rápido y larga autonomía, resolviendo muchos de los problemas que los automóviles eléctricos aún enfrentan. Pero los fabricantes de automóviles han descontinuado en los últimos años los modelos de hidrógeno debido al alto costo de la tecnología y, más recientemente, a la creciente presión para ahorrar efectivo para hacer frente al coronavirus.
Daimler dejó de desarrollar una versión de hidrógeno de su GLC en abril y dijo que se enfocaría en fabricar camiones y furgonetas con motor de hidrógeno con Volvo Group.
Alemania recientemente presentó un plan de US8.0 mil millones para apoyar su industria nacional de hidrógeno. El país está apuntando a elevar su producción de hidrógeno a 5 gigavatios para 2030, cifra que se duplicaría para 2035.
Zipse, quien fue jefe de producción de BMW antes de convertirse en CEO el año pasado, se apega a la estrategia de fabricar tantas variantes de un automóvil. Actualmente, BMW produce automóviles con motor de combustión, híbridos y eléctricos, lo que según Zipse le permite a la compañía reaccionar de manera más flexible a la demanda.
