El futuro es eléctrico: Joe Biden. El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, rodeado por los directivos de las tres grandes empresas automotrices del país y Detroit, Chevrolet, Ford y Stellantis, anunció en la Casa Blanca que para 2030 la mitad de todos los vehículos que se vendan allí serán eléctricos.
El futuro es eléctrico: Joe Biden
“El futuro de la industria automovilística estadounidense es eléctrico,” dijo Biden. “Y no hay marcha atrás”, anunció tras los objetivos de su administración de reducir las emisiones contaminantes.
Junto a Biden estaban Mary Barra, jefe de General Motors; Jim Farley, presidente de Ford, y Mark Stewart, jefe de operaciones de Norteamérica para for Stellantis NV (Fiat-Chrysler-PSA Group). En la reunión no estuvo Tesla, pues según el gobierno estadounidense, sólo se invitó a los tres fabricantes que más empleos generan en EE.UU.
Es un objetivo ambicioso, pues se trata de un volumen muy grande, del orden de 8 millones de autos por año, si se calcula el mercado estadounidense en 16 millones, y entre ellos se incluyen automóviles impulsados por baterías, celdas de hidrógeno e híbridos enchufables. No se mencionaron los híbridos comunes, y ello, sin duda, será un problema para Toyota.
Los incentivos económicos de Washington irán a parar a quienes apuesten por EV, PHEV, así como por Fuel Cell. Se calcula que el gobierno de Biden invertirá 174 mil millones de dólares en este rubro, y de ellos 100 mil millones se irán en incentivos a los consumidores. Asimismo, 7.500 millones se destinarán a las estaciones de carga.
Ford, GM y Stellantis pidieron además inversiones federales en investigación y desarrollo, infraestructura eléctrica, incentivos para la compra de automóviles nuevos y una cadena de suministro sólida.
Los fabricantes de automóviles quieren asegurarse de que la producción satisfaga la demanda y que no haya escasez de piezas y componentes, un cuello de botella actual que afecta a todo el sector automovilístico estadounidense (y mundial) debido a la falta de chips y otras piezas.
Los fabricantes de automóviles estadounidenses ya han anunciado planes para invertir miles de millones en la producción de flotillas sin emisiones. GM, por ejemplo, ha prometido vender solo modelos de cero emisiones para 2035. Ford dijo que espera que el 40% de su volumen global de vehículos sea totalmente eléctrico para 2030, y Stellantis ha dicho que apunta a más del 70% de las ventas en Europa y más del 40% en EE.UU. serán «vehículos de bajas emisiones», es decir, eléctricos o híbridos, para 2030.
«Tengo un compromiso con Mary: cuando fabriquen el primer Corvette eléctrico, seré la primera persona en conducirlo», dijo Biden, propietario de un Stingray 1967.
Después de la ceremonia de firma, Biden dio una vuelta por los terrenos de la Casa Blanca en un Jeep Wrangler Rubicon híbrido enchufable.
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