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Sainz mira como Loeb va a todo o nada

Sainz mira como Loeb va a todo o nada 4

Con nueve títulos en su primera carrera profesional en el WRC y 80 victorias en pruebas del Campeonato del Mundo, Sébastien Loeb destaca por ser un coleccionista voraz. Ahora que dedica la mayor parte de su tiempo al rally raid, el francés cambió de costumbre y empezó ganando cuatro etapas en su debut en el Dakar 2016 en Argentina y Bolivia. Hoy martes en Arabia rubricó la 27ª victoria de etapa de su carrera, tras haber disputado un total de 88 especiales en 8 participaciones, prólogos incluidos. Con una tasa de éxito de un 30,6%, se trata del piloto con un promedio impresionante.

El recorrido desde Hail hasta AlUla en el Dakar 2024 habrá traído algunos recuerdos, pues en este  viaje de vuelta los competidores han podido evitar las rocas volcánicas, puesto que se ha optado por el camino del norte desde Al Duwadimi, pese a mantenerse algunos elementos en común. La mayor parte de los 436 kilómetros requirieron una atención especial en dos sentidos: una conducción precisa para evitar caídas y pinchazos en los tramos pedregosos, así como un cuidado extremo para asegurarse de que las lecturas del road-book permitían ir avanzando por el laberinto de pistas que había por delante.

Loeb sabe que, en su posición de perseguidor, sus opciones estratégicas se reducen ahora al ataque máximo, con la dosis de riesgo que implica pisar el acelerador a fondo. Y así logro su cuarta victoria del año, coqueteando con el límite, ya que se ha «colado» dos veces por el camino, pero todavía tiene la capacidad de hacer que el líder Carlos Sainz tambalee. Nada parece imposible, si el tiempo le sonríe al piloto del BRX Hunter, pero los 20′ 33″ que le separan de Sainz le obligarán a conducir en modo heroico, pues debe descontar siete minutos en promedio por lo que resta del Dakar 2024 . A diferencia de su rival, tendrá poco apoyo de su compañero de equipo Nasser Al Attiyah quien tuvo que abandonar la etapa por segundo día consecutivo debido a problemas mecánicos.

Esta vez descontó 4:14 al español, quien ocupa el primer puesto de la general desde la la crono de 48 horas. La operación del día no le garantiza la victoria en la general, pero el truco de cubrir la especial en convoy, con sus dos compañeros de equipo Mattias Ekström y Stéphane Peterhansel como guardaespaldas, ha ofrecido un respiro al líder de Audi. Y eso que pasó sustos: en su estrategia, Audi detuvo a Peterhansel para escoltar a Sainz y lanzó a Ekström por delante para abrir camino. Todo funcionó bien hasta que el piloto sueco sufrió dos pinchazos que le obligaron a levantar el pie del acelerador para no quedarse sin llantas de repuesto. Entonces, el madrileño debió poner el pecho a la brisa y manejar con precaución, y la tranquilidad que le da mantener a su perseguidor directo a una distancia razonable, en un momento en el que cada etapa representa un paso hacia el éxito.

Clasificación etapa 9 

Clasificación general

Fotos: ASO Dakar.

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