Después de años de rumores y avances, Red Bull finalmente presentó hoy viernes su primer auto de pista para clientes, el RB17, en el Festival de Velocidad de Goodwood. El biplaza con motor central genera más de 1.200 caballos gracias a un motor V10 de aspiración natural de 4,5 litros asistido eléctricamente y capaz de alcanzar 15.000 rpm. Pesa menos de 1,984 libras, y Red Bull promete niveles de rendimiento de un auto de Fórmula 1.
Esa increíble cifra de peso se debe al monocasco de fibra de carbono. La potencia llega a las ruedas traseras a través de una caja de cambios secuencial de seis velocidades y un diferencial de deslizamiento limitado activo con bloqueo hidráulico. No hay reversa; La marcha atrás la lleva a cabo el motor eléctrico montado en la transmisión.
Sólo ese motor eléctrico produce 200 de los 1.200 caballos totales, y el V10 suministra los otros 1.000 caballos. Mantener toda esa potencia bajo control en este F1 con techo se logra gracias al control de tracción y los frenos antibloqueo. La velocidad máxima es de más de 217 mph.
Como era de esperarse, este automóvil fue desarrollado por Adrian Newey, quien le inyectó una aerodinámica impresionante. Red Bull dice que el auto produce hasta 3747 libras de carga aerodinámica, casi el doble de su propio peso. Hay sistemas de gestión de la estela de las ruedas incorporados en la carrocería para suavizar el flujo de aire, y los alerones delanteros y traseros también cuentan con elementos activos para ajustar la aerodinámica a diferentes escenarios.
La mecánica del RB17 está igualmente inspirada en los deportes de motor. Hay una suspensión de varilla ajustable en las cuatro esquinas, con control activo de altura y balanceo, junto con un modo de elevación para superar baches a bajas velocidades. También hay dirección asistida hidráulicamente y frenos de carbono en las cuatro esquinas. Curiosamente, sólo los frenos traseros se controlan mediante un sistema por cable.
Cubriendo esos frenos hay rines de fibra de carbono de 18 pulgadas con llantas slicks Michelin desarrolladas específicamente para este automóvil. Los clientes también pueden optar por una opción de 20 pulgadas envueltas en neumáticos con banda de rodadura de alto rendimiento.
Red Bull diseñó el RB17 para disfrutarlo fácilmente y con frecuencia. Hay opciones de asientos personalizados, una caja de pedales ajustable y espacio de almacenamiento incorporado para trajes de carreras y cascos. El motor funciona con gasolina y cada automóvil tiene una garantía de 2 años/4000 kilómetros (lo que ocurra primero). La compañía afirma que el auto es lo suficientemente resistente como para competir en una carrera de 24 horas sin mantenimiento. El servicio normal se puede hacer en la sede de Red Bull (Austria), en un centro de servicio local o en la ubicación del cliente. Los mantenimientos se llevan a cabo cada 8.000 kilómetros.
Al igual que otros fabricantes de superdeportivos exclusivos para pistas, como Ferrari y McLaren, Red Bull planea organizar una serie de certámenes privados cada año para que los clientes utilicen sus vehículos en la pista según lo previsto.
No hay información sobre el precio del RB17, aunque es seguro pensar que está por encima del millón de dólares. Eso no importa mucho, pues los 50 ejemplares planeados ya se han vendido. Se espera que la producción comience el próximo año.
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