El reemplazo del Huracán ya vio la luz. Lamborghini ha puesto en su lugar al nuevo Temerario, un superdeportivo híbrido enchufable V8 con tres motores y casi 45 por ciento más de potencia que el V10 central al que reemplaza.
El Huracán, que debutó en 2013, se mantuvo fiel al modelo establecido por el Gallardo anterior, pero ha cambiado mucho hasta quedar irreconocible en los últimos 10 años. Pero su vida útil llegó a su término y su reemplazo cambia todo lo que se conocía mecánicamente hablando.
La determinación de Lamborghini de reducir las emisiones y aumentar la potencia, y electrificar todos los modelos de su portafolio, significa que el V10 de 5,2 litros del Huracán tuvo que ser retirado y reemplazado por uno turboalimentado. Cuando Ferrari hizo lo mismo con sus V8 de aspiración natural a mediados de la última década, el resultado fue un motor con mucha más potencia y torque, pero que sonaba mucho menos divertido y perdía 1.000 rpm de su línea roja. Lamborghini estaba decidido a no cometer el mismo error.
Así que sí, el V8 del Temerario cede dos cilindros y algo de pureza sin turbo, pero mejoro el 4,0 litros con cigüeñal en cruz utilizado en otros productos del Grupo VW, incluido el Urus.
El V8 es biturbo con un diámetro de carrera de 90 mm por 78,5 mm (antes 86 x 86) y esta es una de las razones clave por las que puede alcanzar 10.000 rpm.
Esa sería una velocidad demencial para la mayoría de los motores de aspiración natural, pero es inaudita para un motor turbo de producción. Lamborghini promete que el nuevo V8 suena más emocionante que la mayoría de los turbo, e incluso dice que está diseñado a propósito con algunas vibraciones que pasan a la carrocería y a los asientos para intensificar la experiencia sensorial.
Y para asegurarse de que pueda tocar ese limitador de cinco dígitos una y otra vez sin que el motor sufra, este nuevo L411 V8 tiene un montón de materiales y tecnologías ingeniosas diseñadas para soportar enormes fuerzas de rotación. Cosas como un aluminio fundido tipo automovilismo, bielas de titanio y válvulas recubiertas de algo llamado DLC (Diamond Like Carbon) construidas para ser seguras a 11.000 rpm.
El motor de combustión por sí solo genera 789 caballos entre 9.000 a 9.750 rpm, en comparación con los 631 a 8.000 rpm del antiguo Huracan Evo. El torque de 730 Nm del V8 turboalimentado supera con creces los 600 del antiguo V10, incluso sin tener en cuenta los tres motores eléctricos de 110 kW adicionales (148 caballos) del tren motriz.
Dos de ellos se encuentran en la parte delantera para hacer que el Temerario tenga tracción total y proporcionar una función de vectorización de torque, al mismo tiempo que lo convierte en un vehículo eléctrico con tracción delantera en modo Citta (ciudad). Un tercer motor montado entre el V8 y la nueva transmisión de ocho velocidades funciona como generador de arranque y completa la curva de torque con hasta 300 Nm, supuestamente enmascarando cualquier retraso del turbo.
En total, se desarrollan impresionantes 907 caballos para superar en potencia al Ferrari 296 GTB (819 HP) y a los McLaren Artura (671 HP) y 750S (740 HP). No obstante, Lamborghini castiga la balanza con esa nueva musculatura.
El Temerario pesa 1690 kg, lo que supone 268 más que el Huracan LP640 Evo y 220 kg más que la masa declarada del Ferrari 296. Es cierto que el Ferrari tiene tracción trasera, por lo que debería ser más ligero, pero Lamborghini dice que su eje delantero eléctrico pesa solo 73 kg.
La marca italiana afirma que el Temerario acelera de 0 a 100 kmh en 2,7 segundos, en comparación con los 2,9 segundos de su predecesor, y la velocidad máxima sube de 325 a 343 km h. Pero un pequeño aumento en la distancia de frenado de 100 a 0 km/h de 31,9 a 32 m es un recordatorio de que hay más masa que manejar esta vez.
Si la especificación del tren motriz hace que el Temerario suene como una versión menos extrema del V12 del Revuelto, el diseño exterior respalda esa idea. Aunque las siluetas son similares y ambos tienen escapes altos y montados en el centro, los dibujos de las entradas de aire frontales y laterales del nuevo deportivo son menos extravagantes, y sus delgados faros LED corren horizontalmente a lo largo en lugar de estar inclinados hacia atrás.
Las diferencias entre los superdeportivos V12 y V8 son más que visuales. Mientras que el Revuelto está construido alrededor de un chasis de fibra de carbono, el Temerario emplea una construcción de estructura espacial de aluminio, como el Huracán anterior. La distancia entre ejes del nuevo auto, de 2.66 metros, es 121 mm más corta que la de su hermano mayor, pero 38 mm más larga que la del Huracán, lo que mejora el espacio para las piernas. Lamborghini dice que también hay más lugar para la cabeza, por lo que incluso los conductores altos pueden usar los cascos necesarios en los certámenes de pista.
En el interior, el Temerario parece idéntico al Revuelto. Sigue el mismo diseño del tablero con un grupo de indicadores digitales configurables, pantalla táctil vertical y un botón de arranque en la consola oculto debajo de una cubierta roja estilo avión de combate. Y el volante de base plana tiene el mismo selector de modo de conducción y el botón EV es idéntico. Los conductores pueden elegir entre cuatro modos: Citta, Strada, Sport Corsa y Corsa Plus, el último de los cuales desactiva el ESP.
También hay un modo de derrape con tres configuraciones para adaptarse a diferentes niveles de experiencia en sobreviraje. Si se desea compartir la destreza en el derrape para ser un YouTuber famoso, es posible grabar la acción utilizando la Lamborghini Vision Unit de triple cámara, que graba imágenes de la carretera, los ocupantes y una vista por encima del hombro. El Temerario también registra datos de telemetría de 150 circuitos de todo el mundo, e incluso puede combinarlos con las lecturas de frecuencia cardíaca del conductor si tiene un reloj Apple.
Conducir en modo EV mantendrá baja la frecuencia cardíaca, pero no por mucho tiempo. Lamborghini no da una cifra de autonomía, pero dice que la pequeña batería de 3,8 kWh permitirá recorrer máximo 4 km antes de que entre en acción el motor de combustión. El Ferrari 296, más ligero, tiene el doble de capacidad y tiene una autonomía EV en el mundo real de 11 a 16 kms.
Cargar el Temerario lleva 30 minutos utilizando una fuente de alimentación de 7 kW, o el V8 puede hacer el trabajo en movimiento si se cambia del modo híbrido al modo recarga. Sin embargo, se sacrificarán algunos caballos: al activar el modo recarga, la potencia se reduce a 715 caballos, aunque sigue siendo mucho más atractivo que los 187 HP disponibles en modo EV.
Lamborghini no ha revelado los precios del Temerario, pero considerando toda la potencia, el rendimiento y la tecnología adicionales que ofrece en comparación con el Huracán (US 250,000), es posible que ronde los US 340,000 que pide Ferrari por el 296 GTB.
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