Otro carguero se ha hundido, llevando consigo cientos de millones de dólares. El Morning Midas, un enorme buque que transportaba vehículos de China a México, se hundió frente a las costas de Alaska la semana pasada tras un voraz incendio a bordo. Ahora, los analistas comienzan a calcular los daños, y las cifras no pintan nada bien. Según las primeras estimaciones, la pérdida podría costar a la industria automotriz unos 559 millones de dólares.
Este es el tercer incidente de navíos afectados por el fuego en la mitad del océano en pocos años. El Morning Midas se suma al Felicity Ace y al Fremantle Highway en un trío de accidentes marítimos que, en conjunto, han enviado alrededor de 11.000 vehículos al fondo del mar. En conjunto, estos naufragios han causado más de 1.800 millones de dólares en pérdidas, según datos del Anderson Economic Group (AEG).
Zodiac Maritime, operador del barco, informó que se detectó humo saliendo de una cubierta que transportaba vehículos eléctricos antes de que la situación se agravara. En total, el barco transportaba 3.159 vehículos. De estos, se cree que entre 681 y 861 eran híbridos, y entre 65 y 70, modelos totalmente eléctricos. Todas las unidades perdidas pertenecían a fabricantes chinos como Great Wall Motor y Chery.
Si bien Anderson Economic Group estima el valor de la carga destruida en 120 millones de dólares, el impacto económico general es mucho mayor. Las labores de limpieza, el daño ambiental y la pérdida de ingresos futuros para diversas personas e industrias son parte de las consecuencias.
Esto incluye a agencias del gobierno estadounidense como la Guardia Costera, empleados de Zodiac Maritime, trabajadores portuarios, la industria pesquera regional y residentes que viven cerca de la zona del derrame
La estimación de AEG también incluye los costos proyectados para las operaciones de salvamento y la recuperación ambiental. Sin embargo, no considera las pérdidas que podrían sufrir los concesionarios de automóviles, las empresas de logística o los clientes en espera debido a la interrupción de las cadenas de suministro.
El valor perdido en el Midas es mucho menor que el de los desastres de Felicity Ace y Fremantle Highway. En ambos casos, los barcos transportaban automóviles más costosos, lo que resultó en pérdidas de carga estimadas en 334,5 millones de dólares para el Felicity Ace y 302,6 millones de dólares para el Fremantle Highway.
El incendio a bordo del Morning Midas se declaró el 3 de junio. Los 22 tripulantes abandonaron el barco poco después de que fracasaran los intentos de sofocarlo. Finalmente, se hundió en el abismo el pasado 23 de junio.
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