Mientras los fabricantes de automóviles globales se apresuran a reajustar sus operaciones, Volkswagen está cerrando una importante fábrica china. Tras llegar a un acuerdo con el sindicato alemán IG Metall el año pasado para mantener en funcionamiento algunas plantas nacionales, la compañía ha confirmado el cierre de una antigua planta conjunta en Nanjing.
La planta, gestionada en colaboración con su socio SAIC, funciona desde 2008 y tiene capacidad para producir 360.000 vehículos al año.
La noticia del cierre se publicó inicialmente en un periódico alemán, y poco después Volkswagen confirmó la decisión, pero no especificó cuándo se produciría. Según Handelsblatt, el cierre se llevará a cabo gradualmente durante el segundo semestre del año.
«Podemos confirmar que la planta de SVW en Nanjing ha finalizado su producción», confirmó VW en un comunicado a la agencia Reuters. «Muchas plantas de SAIC VOLKSWAGEN se están convirtiendo actualmente o ya se han convertido para la producción de vehículos eléctricos».
El futuro de la fábrica llevaba bastante tiempo en juego. En septiembre pasado, se reveló que cerraría este año debido a la disminución de las ventas locales de vehículos de combustión. En ese momento, se encargaba de la producción del VW Passat y varios modelos de Skoda.
Volkswagen emplea a más de 90.000 personas en China y opera 39 fábricas. Sin embargo, la tasa de utilización en muchas de ellas ha disminuido significativamente desde la pandemia del COVID-19. Se entiende que la planta operaba a tan solo el 58% de la capacidad posible.
El comunicado emitido por VW indicó que algunas de sus plantas con SAIC ya se han reconvertido para la producción de vehículos eléctricos, pero no especificó si la de Nanjing será una de ellas.
No olvide visitarnos en