El Bombardier Global 8000 aún no está en servicio, pero ya está causando sensación en todo el mundo. Se puede afirmar que es uno de los aviones civiles más esperados jamás construidos. No solo es el avión ejecutivo más rápido del mundo, sino que promete la mayor velocidad máxima jamás registrada en la historia de la aviación civil. Incluso superó sus propias expectativas, como se anunció en la Convención y Exhibición de Aviación Comercial NBAA 2025 en Las Vegas (EE.UU).
El buque insignia de Bombardier está a punto de desempeñar un papel memorable en el sector de la aviación comercial japonesa. Sojitz Corporation, empresa reconocida como uno de los principales proveedores de aviones comerciales del país, ha hecho un pedido de un Global 8000 y un Global 6500. Ambos formarán parte del Programa Share Jet (SJP) de Sojitz, el primero de su tipo, dirigido a grandes aviones comerciales de ultra largo alcance y capaces de adelantar vuelos transpacíficos.
Los Global 8000 y Global 6500 que se entregarán para este SJP, pionero en la industria, también reflejarán un nuevo nivel de lujo en términos de estilo y comodidad. Contarán con interiores a medida y prestarán atención especial a cada detalle, desde la distribución hasta la selección de materiales.
Más allá de las estadísticas de rendimiento de este avión de nueva generación, los pasajeros pueden esperar disfrutar de un confort y una funcionalidad de primer nivel. La configuración de la cabina incluye cuatro espacios excepcionales, un área de descanso independiente para la tripulación y la promesa de la mayor longitud de asiento en una aeronave de esta categoría. Además, es la cabina más saludable de la industria.
Sojitz planea extender este programa Share Jet más allá de las fronteras de Japón, lo que llevará el Global 8000 a múltiples destinos en Asia. Este reciente pedido se basa en la amplia experiencia del operador con aviones Bombardier en Japón, que describe como excepcionalmente confiables.
El Bombardier Global 8000 promete una autonomía líder en su clase de 8000 millas náuticas (14 800 km) y una velocidad máxima de Mach 0,95 (1.161 km/h). Además, su diseño mejora el rendimiento en pista, permitiéndole acceder a muchos más aeropuertos que los jets ejecutivos convencionales.
Está previsto que este avión entre en servicio antes de finales de este año, cuando mostrará oficialmente al mundo lo que puede hacer en operaciones reales y las ventajas que aporta para el futuro de la aviación comercial y de negocios.
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