El Estado Ciudad del Vaticano, en cabeza del Papa Francisco, y la marca Volkswagen llegaron a un acuerdo para electrificar la flota de vehículos de aquí hasta 2030.
A principios del próximo año, la empresa alemana entregará 40 modelos totalmente eléctricos de su familia ID, que van desde el ID.302 hasta el ID.4 y el ID.5.
Los vehículos forman parte de la estrategia de descarbonización del Vaticano, cuyo objetivo es que la flota de autos sea climáticamente neutra de aquí a 2030. Imelda Labbé, miembro del Consejo de Dirección de Ventas, Marketing y Posventa de Volkswagen Turismos, y Christian Dahlheim, presidente del Consejo de Administración de Volkswagen Financial Services AG, entregaron personalmente al Papa los dos primeros vehículos eléctricos, dos modelos ID.3 Pro Performance.
La movilidad del Estado Vaticano está en el centro de un programa denominado «Conversión Ecológica 2030», que tiene como objetivo reducir la huella de CO2 del parque de vehículos. Para lograrlo, los vehículos existentes se sustituirán gradualmente por eléctricos para que toda la flota sea neutra en emisiones de CO2 de aquí a 2030.
Volkswagen, a través de su división Financial Services, venderá al Estado del Vaticano una flota a partir de febrero de 2024, empezando por el ID.3 Pro Performance, con baterías de 77 kWh, 204 caballos, 310 Nm de torque y 560 kilómetros de autonomía.
En etapas posteriores, se irán entregando progresivamente más vehículos cero emisiones, también de las marcas del Grupo Volkswagen hasta que toda la flota haya sido completamente reemplazada en 2030.
Durante su historia, el pequeño país ha utilizado modelos de diferentes marcas como Fiat, Lancia, Alfa Romeo, Renault, Hyundai, Mercedes-Benz, Toyota y Lamborghini. Todos ellos serán vendidos o guardados en el museo de la Santa Sede.
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