Presión, eso es lo que ha puesto Ford a RedBull F1 en las últimas horas tras una carta enviada por el CEO de la marca estadounidense a la firma austriaca por el caso de Christian Horner.
El director general de Ford, Jim Farley, está pidiendo una resolución rápida a la investigación interna que adelanta la escudería a su director deportivo. Según la misiva, a la que ha tenido acceso la agencia de noticias AP, Farley muestra su «descontento por las acusaciones no resueltas de comportamiento inapropiado por parte de la dirección de Red Bull Racing». Y también se queja de que «han pasado 11 días desde que Ford pidió por primera vez más información sobre la investigación” sobre las acusaciones contra Horner.
«Es imperativo que nuestros socios para las carreras compartan y demuestren un compromiso genuino con esos mismos valores. Mi equipo y yo estamos disponibles en cualquier momento para discutir este asunto. Seguimos insistiendo y esperanzados en una resolución que todos podamos respaldar», escribió Farley.
Esta declaración es particularmente grave si se tiene en cuenta que desde enero de 2023 Ford es el socio de RedBull para el desarrollo del motor 2026, que cumplirá con los cambios de reglamento de la FIA. La máquina híbrida tendrá una parte eléctrica que desarrollará 475 caballos de los 950 que registrará en el dinamómetro.
Se espera que la escudería se pronuncie definitivamente sobre Horner en las próximas horas, antes del inicio de la temporada 2024 en Bahrein este fin de semana.
Fotos: RedBull, Ford.
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